Primero, verifique si el cargador funciona correctamente e intente usar otro cargador para las pruebas. Confirme si la interfaz USB-C del dispositivo está bloqueada por polvo o objetos extraños, o dañada físicamente. Compruebe si las conexiones entre el cable, el dispositivo y el cargador son seguras, e intente volver a planificar. Si está conectado a través de un muelle, asegúrese de que el muelle esté funcionando correctamente y funcione bien. Si todo lo anterior es normal, puede haber una falla interna con el cable, y se recomienda reemplazar el cable.